viernes, 26 de noviembre de 2021

Alemania tiene nuevo gobierno; le falta liderazgo

 

¿Recupera el gigante su cabeza?

Tras 16 años de gobierno de Angela Merkel, la recuperación de la economía y la renacida pandemia exigen del nuevo gobierno una capacidad de decisión que aún no se avizora

por Eduardo J. Vior
Infobaires24
26 de noviembre de 2021

Casi exactamente dos meses después de la elección parlamentaria del 26 de septiembre los líderes del Partido Socialdemócrata (SPD), el Partido Verde (B90/Die Grünen) y el Partido Liberal Democrático (FDP) anunciaron este miércoles que se habían puesto de acuerdo sobre el contrato que regirá la coalición –apodada “semáforo” por los colores verde, amarillo y rojo de los componentes- que asumirá la semana próxima para gobernar el país hasta 2025. Tanto su propio pueblo como sus muchos interlocutores externos esperan que la mayor potencia del continente y tercera economía mundial adopte un curso previsible. Lamentablemente, el programa de coalición dado a conocer esta semana no parece capaz de superar la contradicción entre sus lazos económicos con Rusia y China, y su alineamiento ideológico y estratégico con EE.UU. y dentro de la OTAN.

“Atreverse a más progreso” es el lema de la nueva coalición y más abajo se aclara: “Alianza por la Libertad, la Justicia y la sostenibilidad”. Sus tres líderes (de izq. a der.) son Christian Lindner (Liberal), el Canciller Olaf Scholz (Socialdemócrata) y Annelene Baerbock (Verdes).

La nueva alianza de gobierno de Alemania se anunció rememorando el origen de la coalición socialdemócrata-liberal que encabezó Willy Brandt (1969-74). “Atreverse a más democracia” (Mehr Demokratie wagen) era entonces la consigna; “Atreverse a más progreso” (Mehr Fortschritt wagen) es la actual. La diferencia entre el ímpetu reformista de entonces y el tecnocratismo actual es expresiva de la falta de impulsos de la Europa actual. Como muestra el programa de gobierno que presentaron el miércoles, cada uno de los partidos firmantes se quedó con su porción de la torta y nadie presenta una fórmula superadora.

Los aspectos más salientes del recién firmado contrato son el acelerado abandono del carbón, el forzado avance hacia la movilidad eléctrica, el aumento del salario mínimo, la regulación del consumo del cannabis recreativo, una política inmigratoria más tolerante, la introducción del ingreso ciudadano y mayores subsidios por cuidados dentro de la familia. También se propone modernizar la infraestructura vial, ferroviaria y de comunicaciones, incrementar la transición hacia la economía digital y modernizar la administración pública. En el plano internacional se relativiza el rechazo contra el Tratado de la ONU de 2017 para la prohibición de las armas nucleares y se anuncia una política enérgica de defensa y promoción de los derechos humanos. Sin embargo, al mismo tiempo los firmantes se avinieron a la exigencia liberal de que no crezca el endeudamiento público ni se aumenten los impuestos. Una verdadera cuadratura del círculo para una política de reformas como la que supuestamente se está presentando.

La coalición del “semáforo” quiere adelantar la eliminación del carbón para 2030, afirma el acuerdo. Para lograrlo, la energía eólica y la solar deben ampliarse masivamente. Para 2030, el 80% del consumo de electricidad deberá proceder de energías renovables, lo que requerirá la construcción de más centrales eléctricas de gas, hasta tanto se difunda la generación de energía por  hidrógeno. Teniendo en cuenta la importancia del gas como energía de transición, no se entiende, entonces, que la autoridad administrativa alemana haya suspendido el proceso de autorización del gasoducto Nord Stream 2. ¿O es que piensan comprar el caro gas licuado estadounidense? 

Los socios del futuro gobierno también quieren triplicar la capacidad instalada para la producción de energía de origen solar hasta alcanzar los 200 gigavatios, entre otras cosas haciendo obligatoria las placas fotovoltaicas en los tejados comerciales. Según el acuerdo, también se acelerará la expansión de la energía eólica en alta mar, que deberá ascender a 30 gigavatios en 2030 (antes se programaban 20 GW).

La eliminación del carbón también se acelerará mediante el comercio europeo de derechos de contaminación por CO2. Por ello, la coalición quiere presionar a la UE para que fije un precio mínimo para los certificados que las centrales eléctricas necesitan. Si no se consigue, se decidirá a nivel nacional que el precio no caiga por debajo de los 60 euros por tonelada. En la actualidad cuesta algo menos de 70 euros.

En el futuro, la protección del clima se integrará en las decisiones del gobierno federal con más fuerza que en el pasado. Cada ministerio debe examinar sus proyectos de ley teniendo en cuenta su impacto climático y su compatibilidad con los objetivos nacionales de protección del clima, así como presentar la correspondiente justificación: el llamado chequeo climático. La Ley Federal de Protección del Clima se desarrollará de forma «consecuente» antes de finales de 2022 y se introducirá un programa de protección climática de emergencia.

El salario mínimo legal se incrementará de una vez de los €9,60 por hora actuales a €12. La comisión del salario mínimo decidirá entonces sobre nuevos aumentos. Por su parte, la magra ayuda social actual será sustituida por un ingreso ciudadano y, por lo tanto, desvinculada de la situación particular de emergencia.

La coalición del semáforo quiere introducir la distribución controlada de cannabis a los adultos «con fines de consumo» en las tiendas autorizadas. Así se controlaría la calidad, se evitaría la transmisión de sustancias contaminadas y se garantizaría la protección de los menores. Al mismo tiempo se van a endurecer las normas de comercialización y patrocinio del alcohol, la nicotina y el cannabis.

La emisión de visados se acelerará y se digitalizará cada vez más. Las personas que el 1 de enero de 2022 lleven cinco años viviendo en Alemania, no hayan cometido ningún delito y “estén comprometidas con el orden democrático” obtendrán un permiso condicional de residencia por un año. De este modo se espera acelerar la estabilización de los cientos de miles de refugiados y solicitantes de asilo acogidos desde 2015 y que todavía esperan a resoluciones de la autoridad de inmigración que les permita estabilizarse en el país.

La empresa estatal Deutsche Bahn AG es un instrumento fundamental para la transición ecológica de la economía alemana.

A partir de 2022, se incrementarán los fondos de regionalización en el transporte local. La empresa ferroviaria estatal Deutsche Bahn AG seguirá siendo de propiedad pública. Se reforzará el tráfico transfronterizo y se desarrollarán servicios ferroviarios nocturnos con la UE y los Estados miembros. Para 2030, el 75% de la red ferroviaria deberá estar electrificada. Al mismo tiempo Alemania se convertirá en el primer mercado de la movilidad eléctrica con al menos 15 millones de coches eléctricos en 2030. El SPD, los Verdes y el FDP también quieren una reforma del peaje para camiones y, a partir de 2023 aplicar una «diferenciación de CO2» del peaje para vehículos pesados.

El nuevo gobierno alemán quiere abandonar el rechazo fundamental del país al Tratado de las Naciones Unidas sobre la Prohibición de las Armas Nucleares (de 2017) y participar en la Conferencia de las Partes en calidad de observador. Todas las potencias nucleares, así como todos los Estados de la OTAN, incluida Alemania, han rechazado hasta ahora este tratado por considerar que los tratados previamente acordados ofrecen una mejor base para el desarme nuclear.

Contradictoriamente, la futura coalición se propone respetar a partir de 2023 los límites para la toma de deuda pública previstos en la Ley Fundamental. No obstante, el año que viene todavía se pedirán nuevos préstamos para paliar los efectos de la pandemia.

Las medidas de transición hacia una economía ecológica con empleos de calidad suponen enormes inversiones. Si no se aumentan los impuestos ni el déficit público, el dinero debe provenir de las exportaciones. Hoy en día China es de lejos el mayor socio comercial de Alemania. La transformación de la movilidad sólo es realizable, si las empresas automotrices germanas cuentan con un mercado del tamaño del chino. Sin embargo, en el contrato de coalición la República Popular es mencionada de un modo especialmente negativo.

La coalición del “semáforo” pretende ampliar su comercio y asociación económica con Pekín y al mismo tiempo increpar públicamente a sus dirigentes para que acepten críticas y denuncias sobre el manejo de sus asuntos internos. Si insiste en este sinsentido, dañará las vitales relaciones económicas entre ambos países y, si no lo hace, será fácil pasto de la crítica interna y externa por incongruencia. En ambos casos perderá legitimidad y cercenará su propia capacidad de decisión.

El contrato de coalición que acaban de presentar los líderes de la socialdemocracia, los liberales y los ecologistas es contradictorio e inconducente. Su contenido refleja la contradicción entre intereses y presiones encontradas en el seno de la futura coalición, que a su vez se corresponden con las presiones que aherrojan al país desde el Este y el Oeste. La República Federal sólo puede desarrollarse con sentido social y ecológico, si se complementa con el bloque euroasiático, pero, para poder hacerlo, debe aventar entre sus aliados el temor al resurgimiento de una gran potencia independiente en el centro de Europa. Si Olaf Scholz no se muestra capaz de mantener unida su coalición, mientras estrecha los lazos con el Este y al mismo tiempo apacigua los temores de sus aliados sumándolos al proyecto de complementariedad, el país se estancará y quedará a merced de las presiones encontradas de amigos y adversarios

jueves, 25 de noviembre de 2021

La causa popular encontrará su futuro en el pasado

 

La esperanza de Chile está en su historia

Si no reconstruye el puente con el pasado de luchas por la democracia y los derechos, la joven dirigencia de izquierda no podrá movilizar a los abstencionistas ni interpelar a los indecisos

Por Eduardo J Vior
Por Eduardo J. Vior
Agencia Télam
24-11-2021 | 20:03
Dos visiones contrapuestas de Santiago de Chile
Dos visiones contrapuestas de Santiago de Chile


José Antonio Kast ganó en la primera vuelta de la elección presidencial chilena, entre otras razones, porque supo conectar el cansancio de muchas y muchos chilenos tras dos años de movilizaciones, pandemia y crisis económica con el imaginario de paz social, crecimiento económico y estabilidad que habría ofrecido el régimen de Augusto Pinochet (1973-1990). Por el contrario, la joven dirigencia de la izquierda recogió la herencia de las luchas estudiantiles desde 2006 y de la campaña contra el sistema privado de pensión, pero no recupera aún el lazo con las luchas populares por la democracia y los derechos sociales que han recorrido toda la historia de su patria. A su apelación al futuro aún le falta echar raíces.

“Nos han declarado la guerra. Nosotros les declaramos la esperanza”, proclamó Gabriel Boric en la noche del domingo 21. Fue acertada la finta retórica frente a la violencia del discurso del candidato vencedor, José Antonio Kast, que prometía la guerra contra “el terrorismo” y “el comunismo”. Por primera vez desde la transición a la democracia Chile se dirime entre dos proyectos de país. El “modelo chileno” instaurado por la dictadura de Augusto Pinochet Ugarte ha fracasado. Después de casi medio siglo de vigencia el neoliberalismo ha sido incapaz de garantizar condiciones de vida dignas a la mayoría de la población y de generar un proceso de acumulación interna que le permita reproducirse sin inyecciones financieras externas, sin aumentar la explotación de la mano de obra y sin depredar los recursos naturales. Ya en 2017 el 50% de los hogares de menores ingresos tenía un 2,1% de la riqueza neta del país, el 10% concentraba un 66,5% del total y el 1% más acaudalado concentraba el 26,5% de la riqueza. Esta desproporción no ha hecho más que agravarse por la pandemia y la crisis económica.

Especialmente en los últimos años los gastos elementales para el sostenimiento de la vida se han vuelto intolerables y la incapacidad del segundo gobierno de Sebastián Piñera (2017-22) para afrontar las manifestaciones de protesta que comenzaron en octubre de 2019 y su tratamiento de la pandemia han demolido su credibilidad. El gobierno llegó a las elecciones con una tasa de aprobación del 5%.

El candidato pinochetista José A. Kast sacó en la primera vuelta electoral del domingo pasado 27,9% de los votos, superando a Gabriel Boric por 2,1 puntos (sacó 25,8%). La diferencia es menor que la prevista en la mayoría de las encuestas, pero para la izquierda difícil de remontar. Kast obtuvo ya el apoyo del candidato progubernamental Sebastián Sichel (12,79%) y espera conquistar los votos del empresario neoliberal Franco Parisi, quien obtuvo un sorprendente 12,78% haciendo campaña desde el exterior. Si los votos de la primera vuelta se sumaran en la segunda, la ultraderecha ya habría triunfado. El 52,3% de los casi 15 millones de habilitados para votar, empero, no ha concurrido a las urnas. Este contingente abarca sobre todo los sectores populares y juveniles desencantados con la elite política, con 30 años de democracia amañada y la dureza de condiciones de vida apenas sostenibles.

El pinochetismo sabe que no puede ampliar su apoyo más allá de la eventual conquista de una parte de los votos de Parisi. Por ello advierte contra el “comunismo” que advendría con Boric, para amedrentar e inmovilizar a las masas populares. Por su parte, la dirigencia de izquierda afirma haber comprendido donde están sus posibles votantes. “Me bajé del árbol”, dijo Boric este miércoles 24, al visitar La Pintana, una comuna en el extremo sur del Gran Santiago gobernada por la Democracia Cristiana. Pero no basta: “a la campaña de Boric hay que meterle pueblo”, sentenció a su vez Rodrigo Mundaca, alcalde de Valparaíso.

La campaña para la segunda vuelta ya comenzó con todo. Ambos candidatos están retocando sus programas, para conquistar votos en el centro del espectro político. Mientras que Kast recibió el apoyo del oficialista Sebastián Sichel, la demócrata cristiana Yasna Provoste (y la presidenta de su partido, Carmen Frei), el progresista Marco Enríquez Ominami y el ex presidente soicalista Ricardo Lagos (2002-07) ya se expresaron por Boric.

Gabriel Boric Frente Amplio candidato presidencial por la lista de Apruebo Dignidad
Gabriel Boric (Frente Amplio), candidato presidencial por la lista de Apruebo Dignidad


El candidato ultraderechista se concentra en su manejo casi monopólico de los medios y de las redes sociales. Al de Apruebo Dignidad, por el contrario, propios y ajenos lo están azuzando, para que salga de Twitter, del centro de Santiago y de la Academia. En suma, “bajarse del árbol” quiere decir caminar la calle de las poblaciones y ciudades del interior que no lo votaron.

Tan importante como el apoyo de la antigua Concertación (DC, PS, PPD y PR) es el espaldarazo que recibió Boric también el miércoles de un grupo de convencionales constituyentes de pueblos originarios y alcaldes de la Región Metropolitana y Valparaíso, donde destaca el apoyo del dirigente porteño Jorge Sharp, quien se había apartado de Boric en noviembre de 2019, luego de que éste firmara el acuerdo multisectorial convocando a la paz tras el escalamiento de los enfrentamientos entre manifestantes y carabineros.

El apoyo de dirigentes de la izquierda y centro amplía la campaña del líder de Apruebo Dignidad y lo identifica con la transición hacia la democracia de hace tres décadas, pero aún no le da el perfil social y popular que necesita para llegar a los millones de pobres y desclasados que ha dejado casi medio siglo de neoliberalismo. La joven dirigencia de izquierda no reivindica a Salvador Allende (1970-73), para no espantar a los demócratas cristianos. Sin embargo, no sería contradictorio hacerlo junto con la recuperación de Eduardo Frei (1964-70), a quien pueden sumarse gobernantes de los siglos XIX y XX que –en el movimiento contradictorio de todos los países de la Patria Grande- fueron realizando las reformas políticas, económicas y sociales luego tronchadas por la dictadura de Augusto Pinochet Ugarte (1973-90). El hundimiento del régimen político pergeñado por éste en la Constitución de 1980 permite al pueblo chileno volver a construir libremente su futuro, pero para ello debe recurrir a su pasado.
No basta con que Gabriel Boric “se baje del árbol”. Si quiere enlazar con los millones de “rotos” que pululan por las calles y sobreviven sin “pega” fija, tiene que apelar a su memoria. Hubo tiempos en los que vivieron mejor. Allí está la esperanza en un futuro digno.

domingo, 21 de noviembre de 2021

Rusia y China respaldan su poderío con visiones globales

 

Washington pierde el control de la agenda mundial

En las recientes reuniones entre dirigentes norteamericanos, rusos y chinos se confrontaron chicanas propagandísticas con posiciones sólidas fundamentadas en visiones de largo plazo

por Eduardo J. Vior
Infobaires24
20 de noviembre de 2021

El pasado lunes 15 Joe Biden, y Xi Jinping, mantuvieron una videoconferencia de tres horas y media en la que tocaron todos los temas de conflicto entre ambos países, sin entenderse en casi ninguno. Ya previamente, el 2 de noviembre, la reunión que el Director de la CIA, William Burns, y el Secretario del Consejo de Seguridad Nacional de Rusia, Nicolay Patrushev mantuvieron en Moscú tuvo un trascurso y resultados similares. El liderazgo estadounidense sigue confrontando a quienes lo desafían con consignas propagandísticas, mientras éstos les responden con visiones a largo plazo que ponen orden al sinfín de problemas a resolver.

El pasado lunes 15 de noviembre los presidentes de Estados y China mantuvieron su primer encuentro desde que Joe Biden asumió la presidencia en enero de 2021. La reunión se realizó virtualmente y en la misma trataron todos los temas de conflicto entre ambas potencias. El clima fue amable y respetuoso, pero sólo se pusieron de acuerdo en buscar mecanismos comunes para combatir el cambio climático, en facilitar el tránsito de los ejecutivos de empresas y en tratar de encontrarse presencialmente antes de fin de año. Por lo demás, se sacaron chispas: Biden acusó a China de violar los derechos humanos en las regiones autónomas de Xinjiang, Tibet y Hong Kong, de poner en peligro la paz de la región con sus amenazas contra Taiwán y de llevar adelante una competencia comercial desleal. A la primera imputación respondió Xi que el gobierno de las tres regiones mencionadas es una cuestión interna de su país, recordó a su colega el compromiso norteamericano con la postura de “una sola China” e instó a EE.UU. a acatar el sistema normativo de las Naciones Unidas y de la Organización Mundial del Comercio.

La diferencia de fondo entre ambos es, empero, de enfoques. Mientras que Biden insistió en la necesidad de ajustar las relaciones bilaterales a “criterios de sentido común”, Xi respondió recordándole los principios de la coexistencia pacífica que guían la política exterior china desde 1955.

Un choque similar se planteó en la reunión que el director de la CIA mantuvo el pasado 2 de noviembre con el secretario del Consejo de Seguridad Nacional de Rusia. Fue el primer encuentro entre Patrushev y Burns desde que este último asumió el cargo de director de la CIA. Hasta ahora el secretario ruso se relacionaba con el Consejero de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, y con él conversó este jueves 18 ante el recrudecimiento de la crisis en Ucrania.

Los dificultosos intercambios contrastan con los claros posicionamientos estratégicos de las conducciones de China y Rusia. El viernes 12 culminó en Pekín la Sexta Sesión del 19º Comité Central del Partido Comunista, de cara a su 20º Congreso que se celebrará en octubre de 2022. La resolución aprobada habla de tres grandes liderazgos, el de Mao, el de Deng Xiaoping y, ahora, el de Xi Jinping. En esencia, el documento plantea tres preguntas: ¿cómo hemos llegado hasta aquí?, ¿por qué hemos tenido tanto éxito? y ¿qué hemos aprendido para que estos éxitos sean duraderos?

A Mao se reconoce el haber puesto de pie a un país destruido por la colonización, en los 27 años que lideró hasta que murió en 1976 haber alfabetizado a casi toda China, unificado y simplificado el idioma, haber dado un rol y liberado a las mujeres de prácticas humillantes, distribuido tierras a cientos de millones de personas, iniciado las primeras industrias, haber recuperado el lugar de China en las Naciones Unidas, etc. Por cierto, ya en su documento de 1981 el partido criticó la revolución cultural (1966-76) como una “década catastrófica”.

El segundo hito, el de Deng Xiaoping, consistió en modernizar China sobre las bases sentadas por Mao. En 1978 inició las políticas de reforma y apertura tomando aspectos del capitalismo para potenciar el mercado, pero dándole otra impronta.

Y luego de otros presidentes que siguieron a Deng e hicieron sus aportes, en 2013 llegó Xi Jinping con la idea de una China más global, atacando, sobre todo, las tres desigualdades que generaron las reformas (la social, la territorial y la ambiental) con grandes innovaciones tecnológicas hasta liderar en varios campos, recientemente con fuertes regulaciones a las finanzas y las telecomunicaciones, pero además articulando mucho más con el juego internacional.

Ni bien llegó a la cúspide del partido, Xi propuso cumplir el «sueño chino» y alcanzar el «renacimiento» del país, es decir volver a situar a China en el centro del mundo. Ya durante su primer mandato Xi estableció un nuevo marco ideológico: el Partido -como poder centralizado- debía dirigir la economía hacia lo que se rebautizó como «la nueva era». Con ello Xi se embarcó en lo que se podría resumir como una forma bastante original de capitalismo de Estado autoritario, en el que el Estado es simultáneamente actor y árbitro de la vida económica.

El equipo del nuevo presidente aprendió muchas lecciones de Occidente, utilizando mecanismos de regulación y supervisión para controlar, por ejemplo, la esfera bancaria en la sombra. Desde el punto de vista macroeconómico, se contuvo la expansión de la deuda pública y se supervisó mejor la concesión de créditos. El nuevo rumbo económico se anunció de facto en 2015 a través de «Made in China 2025», que refleja la ambición centralizada de reforzar la independencia económica y tecnológica del Estado. Esto implicó encarar una seria reforma de las empresas públicas, algo ineficientes. Paralelamente, se produjo un rediseño del «papel decisivo del mercado», con el énfasis de que las nuevas riquezas tendrían que estar a disposición del renacimiento de China. Así que el nuevo acuerdo instauró una «cultura de los resultados» en el sector público, al tiempo que se asociaba al sector privado a la consecución de una ambición nacional general facilitando el papel del partido como director general (inclusive dentro de las mayores empresas privadas) y fomentando las asociaciones público-privadas.

La inquebrantable ambición de Xi es que el renacimiento de China acabe para siempre con el recuerdo del «siglo de la humillación». El aspecto crucial es que Pekín no pretende sustituir la Pax Americana por la propia. La declaración reforzó sutilmente que Pekín no está interesado en convertirse en un nuevo hegemón. Lo que importa, sobre todo, es eliminar cualquier posible restricción que el mundo exterior pueda imponer sobre sus propias decisiones internas y especialmente sobre su singular configuración política.

La resolución del partido del viernes 12 tiene las dimensiones de un manifiesto para el siglo que viene que establece los parámetros con los que China trata al mundo y quiere ser tratada. Al no entenderlo, no dialogar con ellos y no contraponerle su propia visión, el liderazgo norteamericano está entregando la agenda de las relaciones entre ambas potencias.

También Rusia acaba de posicionarse ética y políticamente en el mundo y marcado el rumbo que piensa seguir. El pasado 21 de octubre Vladímir Putin dio una conferencia en el cierre de la reunión  anual del Club Valdai, que se desarrolló en la ciudad rusa de Sochi, a orillas del Mar Negro. Su intervención incluyó un discurso y una discusión con participantes del evento, una más sustanciosa que la otra.

Según el mandatario, «las contradicciones socioeconómicas se han agravado». «Todo el mundo dice que el modelo de capitalismo existente se ha agotado. Dentro de su marco ya no hay forma de salir de una maraña de contradicciones cada vez más enredadas», dijo Putin. El presidente ruso rechazó que la actual crisis mundial estuviera causada directamente por la pandemia de coronavirus. «Las causas del descontento social son mucho más profundas», indicó y señaló que la propagación del virus fue «sólo un pretexto». Como resultado –aclaró-, crece la «desigualdad (…)» y resaltó el ascenso del extremismo y la migración incontrolada como formas de responder a la decepción social.

«Todos los Estados declaran de palabra su adhesión a los ideales de cooperación, su disposición a trabajar juntos para resolver problemas, pero sólo de palabra, continuó. En realidad, está sucediendo lo contrario. (…) Los intereses egoístas han prevalecido por completo sobre el concepto de bien común. (…)», cree el presidente.

Al mismo tiempo, añadió, «el cambio de equilibrio de poder presupone una redistribución de acciones a favor de aquellos países en desarrollo y en crecimiento que hasta ahora se sentían excluidos». «Para decirlo sin rodeos, el dominio de Occidente en los asuntos mundiales, que comenzó hace varios siglos y se convirtió en casi absoluto durante un corto período a finales del siglo XX, está dando paso a un sistema mucho más diverso», explicó y señaló que una transición pacífica desde este tipo de sistema es difícil, pero posible.

Para Putin, la lucha por la igualdad tal como se entiende actualmente en Occidente se ha convertido en un «dogmatismo agresivo al borde del absurdo». «Contrarrestar las manifestaciones del racismo es algo necesario y noble, pero en la nueva cultura de la cancelación se convierte en una discriminación inversa «, dijo el mandatario, quien calificó como «una fantasmagoría total» la discusión sobre los derechos de género de hombres y mujeres.

Ya durante la discusión el presidente ruso insistió en su crítica a la práctica occidental de imponer modelos y juzgar todo el mundo según sus propios y exclusivos valores, pero advirtió también contra la tendencia a reescribir la historia y echar todas las tradiciones por la borda. En consecuencia, se definió, primero, como un “conservador racional” y, finalmente, como un “conservador optimista”.

Pueden discutirse ambas posiciones, pero no se las puede obviar. Tanto la resolución del partido chino como el discurso del líder ruso sientan posiciones que exceden en mucho la coyuntura y dan un marco explicativo a la multitud de conflictos que perturban las relaciones entre el Occidente atlántico y Eurasia. Respaldadas por el poderío efectivo desarrollado por China y Rusia, estos manifiestos definen la agenda de las relaciones internacionales de las próximas décadas. Si EE.UU. sigue pretendiendo rebatir estas sólidas visiones del mundo con chicanas propagandísticas y permanece incapaz de renovar su discurso fundacional, sus contrincantes lo llevarán de la nariz tropezando en cada guijarro de la política mundial.

miércoles, 17 de noviembre de 2021

La crisis migratoria puede acabar en una tragedia

Agencia Télam

Opinión |

Conflicto

Por encima de los alambrados sólo se puede gritar

La crisis migratoria en la frontera oriental de la UE y la multiplicidad de intereses que la complican resaltan la necesidad de restablecer el diálogo entre el Este y el Oeste de Europa

Por Eduardo J Vior
Por Eduardo J. Vior
16-11-2021 | 22:37
Dr. en Ciencias Sociales
Analista internacional

Militares polacos reprimieron a migrantes en la frontera Foto AFP
Militares polacos reprimieron a migrantes en la frontera. (Foto: AFP)


Aumentando la tensión reinante en la frontera entre Bielorrusia y Polonia, un grupo de migrantes lanzó este martes piedras y palos hacia los guardias fronterizos polacos y empezó a romper un alambrado limítrofe, a lo que la policía polaca respondió arrojando agua, gases lacrimógenos y granadas aturdidoras.

Desde agosto pasado se viene agudizando la crisis política y diplomática entre Bielorrusia por un lado y Polonia y Lituania por el otro, que se desató por la afluencia de migrantes y refugiados de Medio Oriente y África que intentan ingresar a la Unión Europea (UE) por ese confín. Sin embargo, en este conflicto se entrelazan intereses y presiones internacionales que exceden ampliamente el ámbito limítrofe. Si bien los migrantes son sólo la carne de cañón del juego entre las potencias, su desesperación puede desatar tragedias que sólo la reconstrucción de los canales de diálogo intraeuropeo puede evitar.

El lunes 15 los ministros de Asuntos Exteriores de la UE impusieron nuevas sanciones contra Bielorrusia, acusándola de haber atraído intencionadamente a varios miles de inmigrantes de Medio Oriente y África para desestabilizar el bloque europeo.

Según ellos, Minsk habría recurrido a esta maniobra, para castigar la intromisión de Bruselas a favor de la oposición en la elección presidencial de 2020 y las protestas posteriores. Bruselas sancionará a unas 33 personas y empresas aéreas, agencias de viajes e individuos de Bielorrusia imputados de haber organizado un "empuje ilegal de migrantes".

Aumenta la tensin en la frontera entre Bielorrusia y Polonia Foto AFP
Aumenta la tensión en la frontera entre Bielorrusia y Polonia. (Foto: AFP)


Desde la pasada primavera boreal grandes grupos de personas que huyen de los conflictos y la pobreza en Oriente Medio y África comenzaron a volar a Minsk, para, a continuación, dirigirse a la frontera con Polonia, Lituania o Letonia con la intención de cruzarla ilegalmente y alcanzar Alemania, el destino final de la mayoría.

En los últimos meses los principales países de origen de los migrantes fueron Irak, Siria, Afganistán, Turquía e Irán. La mayoría de ellos ha pagado entre 14 y 17.000 dólares a agencias de viajes de Oriente Medio, que se asociaron con empresas bielorrusas, para reservar paquetes turísticos que suelen incluir visado, vuelo y alojamiento. Las agencias consiguen los visados en los consulados bielorrusos desde Ankara hasta Beirut, pero actualmente los principales puntos de partida son tres ciudades de la región kurda de Irak: Irbil, Shiladze y Sulaymaniyah. Sobre este dato se volverá especialmente más adelante.

En octubre, Minsk restringió el número de agencias de viajes de Bielorrusia autorizadas a entregar invitaciones turísticas y los vuelos directos de Bagdad a Minsk se suspendieron en agosto, generando un aumento en los precios de los traslados.

El viernes pasado se suspendieron también para los ciudadanos de Irak, Yemen y Siria los viajes vía Turquía. Una compañía aérea privada siria suspendió sus vuelos el sábado y el lunes, finalmente, se cerraron los viajes desde Dubai. De este modo tiende a reducirse el número de inmigrantes que llega a Bielorrusia.

El lunes 15 los ministros de Asuntos Exteriores de la UE impusieron nuevas sanciones contra Bielorrusia Foto AFP
El lunes 15 los ministros de Asuntos Exteriores de la UE impusieron nuevas sanciones contra Bielorrusia. (Foto: AFP)


Todavía no hay detalles sobre las medidas que podría tomar la UE, pero ya está en conversaciones con una docena de países sobre el tema. En agosto, a pedido del bloque europeo Irak accedió durante un periodo limitado a suspender los vuelos de Bagdad a Bielorrusia.

Como resultado, Frontex, la autoridad fronteriza europea, informó que en septiembre se redujo fuertemente el número de iraquíes detectados al cruzar las fronteras terrestres orientales hacia la UE en comparación con agosto: de 1.345 a 181. Pero aún no se sabe si esta tendencia ha continuado en octubre.

Belavia ya tiene prohibido el acceso al espacio aéreo de la UE en virtud de las sanciones impuestas tras un incidente ocurrido a principios de este año, cuando un vuelo de RyanAir con destino a Lituania tuvo que aterrizar en Minsk por una emergencia y las autoridades del país aprovecharon la ocasión para detener a un agente opositor buscado por organizar atentados. Bruselas ahora discute la posibilidad de impedir también que Belavia arriende aviones a empresas con sede en la UE, principalmente irlandesas, ya que empresas de este origen gestionan más de la mitad de los alquileres de aviones en el mundo.

Varsovia y Bruselas afirman que Lukashenko está empujando deliberadamente a los migrantes hacia la UE e incluso los ayuda dándoles herramientas para cortar las vallas fronterizas, pero el gobierno de Minsk ha rechazado la imputación.

Los principales pases de origen de los migrantes fueron Irak Siria Afganistn Turqua e Irn Foto AFP
Los principales países de origen de los migrantes fueron Irak, Siria, Afganistán, Turquía e Irán. (Foto: AFP)


Hay demasiados interesados en explotar el sufrimiento de los refugiados. Sin dudas, al presidente bielorruso le sirve presionar a la UE con ellos, para empujarla a negociar la derogación de las sanciones contra su gobierno y el restablecimiento de las relaciones. Pero también el presidente polaco Duda aprovecha la agudización de las tensiones en su frontera oriental, para reclamar mayores transferencias de Bruselas, hacerse perdonar sus violaciones al Tratado de Lisboa y consolidar el frente nacionalista interno.

Rusia, por su parte, -aunque prudente y recatada- se suma a la presión bielorrusa, para advertir a la OTAN que, si ésta la amenaza en Ucrania y el Mar Negro, la recién formada Unión Ruso-Bielorrusa puede responder en cualquier frontera.

Hasta el momento Estados Unidos no se ha involucrado abiertamente en el conflicto, pero lo hará si la crisis se prolonga o agudiza. No faltan tampoco actores medio-orientales interesados en avivar el fuego.

Hasta hace pocos días Turquía permitía el embarque de refugiados de la región, pero también africanos, desde los aeropuertos de Estambul y Antalya. Es que azuzar la discordia entre la UE y Rusia-Bielorrusia mantiene vigente la política pendular de Recep T. Erdogan.

Que los EAU hayan participado hasta hace pocos días en el tráfico de refugiados no es extraño, si se consideran los múltiples lazos de los jeques del Golfo con las mafias y el tráfico de personas. Por el contrario, suscita más intriga el involucramiento en esta crisis del clan Barzani, señores del Kurdistán iraquí. Tradicionalmente cómplices de la CIA, del Mossad y de Turquía, desde la década de 1960 han participado en todos los negocios sucios de Medio Oriente, pero no se entiende qué ganarían agudizando la crisis migratoria en la frontera oriental de la UE.

Comenzada como una respuesta del gobierno bielorruso a las provocaciones occidentales para alcanzar una negociación, la crisis migratoria se ha independizado y adquirido una dinámica propia impulsada por la desesperación de los miles de personas que huyen de las guerras, la criminalidad y el hambre con la ilusión de salvarse en Europa Central.

Contener los choques entre esta masa y las fuerzas de represión polacas requiere una intensa concertación entre las capitales europeas y resalta el absurdo de un continente que ha interrumpido las líneas telefónicas y sólo se entiende a los gritos por encima de las alambradas.

viernes, 5 de noviembre de 2021

El gobierno de EE.UU. ha perdido sentido de realidad

 Agencia Télam - Opinión
4 de noviembre de 2021

En un bazar de porcelanas no hay lugar para elefantes

El vertiginoso deterioro y la  pérdida de apoyo del gobierno de Joe Biden ya preocupa a los analistas, por sus efectos desestabilizadores sobre la política mundial

Por Eduardo J. Vior
Por Eduardo J. Vior
04-11-2021 | 15:51
Joe Biden.
Joe Biden.

Tras nueve meses de ejercicio del mando, sin ningún resultado positivo ni perspectivas claras, el equipo que ocupa la Casa Blanca pierde aceleradamente la simpatía de sus votantes, no recupera la sintonía con los gobernantes aliados, provoca peligrosamente a sus oponentes en todos los frentes al mismo tiempo y revive ante el continente los peores usos de hace un siglo. Su falta de realismo y de visiones está creando graves riesgos para el orden interno e internacional.

En la semana que pasó se produjeron simultáneamente tres hechos, aparentemente desconexos entre sí, pero que ilustran la falta de ubicación y pérdida del sentido de realidad que está invadiendo a las máximas autoridades de Washington:
El martes 2 hubo elecciones a gobernador en Virginia y Nueva Jersey con resultados francamente malos para los demócratas, ya que un republicano ganó en el primer Estado y otro dificultó mucho el triunfo del gobernador en funciones de Nueva Jersey.

En segundo lugar, en los últimos días se ha celebrado la cumbre mundial sobre el cambio climático que la ONU organizó en Glasgow, Escocia. Aprovechando la ausencia de los líderes ruso y chino, Vladimir Putin y Xi Jinping, el presidente estadounidense Biden se propuso liderarla. El martes pasado lanzó entonces un mordaz ataque contra China por la no comparecencia de Xi y –dijo- por no mostrar liderazgo en la crisis climática. "Nosotros nos presentamos", añadió y "ellos no", comentó en referencia a los presidentes de China y Rusia.

Tras esta proclama ecologista, Biden pasó en la misma conferencia de prensa a atacar a la OPEP+ (la Organización de Países Exportadores de Petróleo más otros –como Rusia- que también lo exportan, pero no pertenecen al gremio), a la que culpó por la inflación en su país, justo dos días antes de la reunión del cártel para discutir la política petrolera.

"Si se echa un vistazo a los precios de la gasolina y a los precios del petróleo, declaró el presidente, se ve que aumentan por la negativa de Rusia o de las naciones de la OPEP a bombear más petróleo". Exigir un mayor bombeo de petróleo en una cumbre mundial sobre el clima es bastante contradictorio con la proclamación de un "liderazgo" en la lucha contra el cambio climático.

Apenas un día después, la Guardia Revolucionaria Iraní (GRI) difundió en las redes una historia propia de John Le Carré:
Hace algún tiempo el capitán y la tripulación iraníes de un petrolero cargado con combustible para Venezuela desviaron la nave con apoyo norteamericano hacia un puerto de los Emiratos. El gobierno estadounidense confiscó entonces el petróleo y lo trasbordó a otro buque con la misma tripulación y comando. 

En esta imagen se pueden ver: 1) el buque de guerra norteamericano 68; 2) el petrolero ocupado por la GRI; 3) El catamarán Shaheed Nazeri donde estaba el puesto de mando iraní; 4) Las lanchas rápidas de la Guardia Revolucionaria apuntando a los navíos
En esta imagen se pueden ver: 1) el buque de guerra norteamericano "68"; 2) el petrolero ocupado por la GRI; 3) El catamarán "Shaheed Nazeri" donde estaba el puesto de mando iraní; 4) Las lanchas rápidas de la Guardia Revolucionaria apuntando a los navíos


Sin embargo, la inteligencia de la GRI descubrió que esta semana el mismo capitán y su tripulación transportarían el petróleo robado a través del Mar de Omán. Entonces lo abordaron con un helicóptero que descendió en su cubierta y lanchas de ataque que se aparearon al navío. Acto seguido los comandos iraníes tomaron el control de la cabina de mando. Mientras tanto, varias lanchas de la GRI se interpusieron entre los destructores de la Va Flota norteamericana y el petrolero, los apuntaron con sus ametralladoras y cohetes y les ordenaron retirarse. Una vez acatada la consigna por los buques de EE.UU., la marina persa llevó el petrolero al puerto de Bandar Abbas, donde se encuentra actualmente.

Los tres hechos encuentran una explicación común en el discurso, del pasado viernes 29, del Jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas estadounidenses, general Mark Milley, durante el acto de asunción del Comando Sur por la generala Laura Richardson: “Acá estamos en un vecindario. Trabajamos codo a codo para asegurar este hemisferio. Quien se oponga a nuestra seguridad, a nuestra prosperidad o la de nuestros aliados, tiene que enfrentarse al Comando Sur.”

Esta retórica, propia de la política del “Gran Garrote” entre 1898 y 1933, muestra que nada ha cambiado en la actitud de la dirigencia norteamericana hacia su país y el mundo: no registran el desencanto de sus propios votantes ante las promesas incumplidas por el gobierno, no se dan cuenta de las flagrantes contradicciones en las que incurren en su propia retórica, desconocen los cambios producidos en su inmediata cercanía y se asombran ante las nuevas relaciones de fuerza que imperan en los distintos escenarios del mundo. El presidente Joe Biden y los miembros de su gobierno están perdiendo aceleradamente la percepción de la realidad. Tratándose de la mayor superpotencia, esta constatación es grave y preocupante. Los próximos meses van a requerir mucha contención de todos los actores políticos. El mundo está en una situación tan delicada como un bazar de porcelanas y no admite elefantes.

martes, 2 de noviembre de 2021

EE.UU. reconoce su responsabilidad por el terrorismo

 

A confesión de parte, relevo de prueba

Este domingo el Wall Street Journal informó que ex militares afganos se están pasando al Estado Islámico, confirmando así el papel de EE.UU. en el origen del terrorismo

por Eduardo J. Vior
Infobaires24
1 de noviembre de 2021

Los Estados Unidos siguen proclamando su decisión de combatir al terrorismo en todas partes del mundo. Sin embargo, una reciente publicación de The Wall Street Journal da cuenta del pasaje de personal de inteligencia y ex miembros de las fuerzas especiales del antiguo régimen afgano a las filas del Estado Islámico-Jorasán (ISIS-K, por su nombre en inglés). La importancia de la información trasciende el escenario afgano, porque confirma que, sin el apoyo y el entrenamiento norteamericano no existiría ningún tipo de terrorismo, en Asia Central, en Oriente Medio o en cualquier otra parte del mundo.

El Estado Islámico-Jorasán (ISIS-K) amenaza la paz y la estabilidad de toda Asia Central.

Muchas de las antiguas fuerzas nacionales afganas que desde la retirada estadounidense en agosto son buscadas por los talibanes se están pasando al Estado Islámico (ISIS-K), según un nuevo informe de investigación del Wall Street Journal. También entre los que se unen a las filas del ISIS en Afganistán, o ISIS-K, hay miembros del antiguo servicio de inteligencia que fueron entrenados por EE.UU. «El número de desertores que se unen al grupo terrorista es relativamente pequeño, pero está creciendo, según personas que conocen a estos hombres, a ex funcionarios de seguridad afganos y a los talibanes», escribe The Wall Street Journal.

Aunque se dice que esto está ocurriendo en pequeñas cantidades y se describe como un movimiento por desesperación, podría ser una gran ayuda para las capacidades del ISIS-K, dado que los miembros de la inteligencia aportan al grupo terrorista una gran experiencia y capacidades muy especializadas. Los críticos de la desastrosa salida de Afganistán ordenada por Biden ya habían advertido desde el inicio que los grupos terroristas aprovecharían los activos «abandonados» por los estadounidenses. Como prueba el informe cita «Un oficial del ejército nacional afgano que comandaba el depósito de armas y municiones del ejército en Gardez, la capital de la provincia sudoriental de Paktia, se unió a la filial regional del ISIS-K y murió hace una semana combatiendo contra los talibanes, según un ex funcionario afgano que lo conocía.» «El ex funcionario contó también que varios otros antiguos miembros de la inteligencia y el ejército por él conocidos también se unieron al Estado Islámico después de que los talibanes registraran sus hogares y exigieran que se presentaran ante las nuevas autoridades del país», continúa el informe. 

En algunos casos estas fuerzas especiales afganas recibieron un entrenamiento de élite por parte de los Navy SEALS o de los Boinas Verdes del Ejército. El informe explica que cientos de miles de ex miembros de las tropas nacionales afganas, oficiales de inteligencia y policías llevan meses sin cobrar desde el colapso del gobierno de Kabul y que al mismo tiempo tienen demasiado miedo de presentarse a trabajar o de identificarse como parte del antiguo gobierno. En un momento en que los talibanes intentan acabar con el ISIS-K, este personal descontento y desempleado es carne de cañón para el reclutamiento del Estado Islámico.

Y luego, con aparente asombro, el informe del WSJ reconoce lo que muchos saben desde hace tiempo:

"Los talibanes han alegado durante mucho tiempo que la provincia de Jorasán del Estado Islámico era una creación del servicio de inteligencia de Afganistán y de Estados Unidos que pretendía sembrar la división dentro de la insurgencia islamista, una afirmación negada por Washington y por el anterior gobierno de Kabul."

Cabe destacar el reciente ejemplo histórico de cómo se formó la resistencia en Irak tras la invasión estadounidense de 2003. Con el derrocamiento de Saddam Hussein cientos de miles de antiguos soldados y policías iraquíes recién desempleados se unieron a grupos radicales para librar una insurgencia mortal, algunos al naciente Estado Islámico. 

Varios atentados suicidas y con coches bomba atribuidos al ISIS-K han causado decenas de muertos en algunas ciudades importantes, incluida Kabul. Funcionarios de Washington han sugerido en varias ocasiones la posibilidad de que el Pentágono pueda ayudar en las operaciones contra el ISIS (por ejemplo con apoyo aéreo), pero el gobierno de Biden se ha resistido argumentando que significaría trabajar directamente con los talibanes. Prefieren hacerlo con los terroristas.


General Kenneth McKenzie Jr., Jefe del Comando Central del Ejército de EE.UU.

Obviamente, no es inocente que el WSJ publique este informe, a todas luces basado en fuentes de inteligencia. Hasta puede provenir del propio Pentágono: después de la derrota y la escandalosa retirada de Kabul son muchos en el gobierno y en las fuerzas armadas los que piden la cabeza del general Kenneth F. McKenzie Jr., jefe del Comando Central del Ejército de EE.UU. Como en toda operación militar fracasada, la primera reacción es buscar un chivo expiatorio. Es la mejor forma de no tener que llevar a los tribunales a los responsables civiles y militares por veinte años de locura.

La cuestión, empero, excede ampliamente las responsabilidades individuales de un par de jefes. Desde 2001 se han decretado sobre los países centrales el estado de emergencia y la vigilancia masiva de las poblaciones, se han limitado severamente las libertades individuales y grupales en nombre de la protección contra el terrorismo. Para combatirlo, al mismo tiempo, se ha llevado la “guerra híbrida” a todos los continentes. En nombre de la libertad han destruido la vida y la libertad de decenas de millones de seres humanos. ¿Y ahora vienen a reconocer que el terrorismo islámico es obra suya? Muy noble, pero muy tarde. La Humanidad espera no sólo que retiren sus fuerzas militares y de inteligencia de todos los países, sino que reparen monetariamente el daño que han ocasionado a cada una de las familias dañadas y que entreguen a la Corte Penal Internacional a los responsables civiles y militares por los crímenes cometidos, por lo menos, desde 2001.